El tamaño sí que importa, pero no en la aceptación vulgar: en este local, lo pequeño es mejor si es más eficaz, concentrado y bello.
A pesar de contar con tan solo 26m2 útiles, en un espacio alargado de 4×7, decidimos dividirlo longitudinalmente en dos zonas todavía más alargadas de 2×7; una para el espacio privado y otra para el espacio público. Un local que aunque diminuto, nos permitimos el lujo de no privarnos de nada, ni siquiera del dulce. Los espacios pequeños ofrecen numerosas ventajas y obligan al arquitecto a hacer más con menos, por lo que no renunciamos a la funcionalidad y amplitud de la zona del obrador y preparación de pasteles, comunicada con la zona de exposición y venta al público incluido escaparate a la calle, ni a la comodidad de una zona con 4 mesas y un banco corrido donde degustar los productos recién elaborados.
Un micromundo donde pueden pasar muchas cosas, un espacio donde se elaboran pequeñas cosas, como una barra de pan, que pueden cambiar el mundo…
PASTELERIA BYE BYE SUGAR.
C/PUERTO RICO 2, MADRID
Arquitecto: i! arquitectura [idoia otegui]
Cliente: BYE BYE SUGAR
Superficie: 66,15m2
Pem: 41.876,00€
Estado: Obra terminada Marzo 2015
Fotografías: Bye Bye Sugar